¿Cómo es posible estar sentado en un lugar
donde hay tantos secretos?
La respuesta que
solo llega a mi cabeza es saber que en aquel lugar hay secretos tan sucios y
oscuros que tú te sentirás bien al saber que no tienes el alma tan negra.
Secretos que te
hacen morder los labios,
Secretos que hacen
que tus ojos vayan en diferentes direcciones.
Secretos que hacen
que tu cuerpo exprese lo que la conciencia oculta,
Secretos que te
hacen perder la razón.
Secretos que son
tu propia condenación.
Dos hermosas
chicas sentadas en el mismo lugar una linda tarde de viernes sus miradas
"tímidas" se entrelazaban con ganas de preguntarse más que un "¿Dónde compraste
esta camisa?"; secretos rondaban en el aire pensamientos inoportunos
rondaban por sus frentes, rosaban sus rostros y llegaban a sus labios pero sus
lenguas los enredaban entre tartamudeos y risas; aquella tarde paso de ser una
simple reunión a ser un juego de mentiras donde preguntas cordiales, miradas,
modales no eran más que hipocresía, secretos de besos apasionados, deseos
encontrados, codicia, todo lo que va más allá de una cara bonita y una
"linda" sonrisa.
Aquella
tarde no solo fue de secretos oscuros como el café que tengo entre mis
manos que por cierto da una sensación cálida y agradable, mientras miro un par
de chicos pasar por mi lado mientras codicio sus labios; estoy sentada en una
mesa aparte del drama del secreto mientras mi mente se siente aliviada de no
estar con aquel par de chicas porque en cuanto termine el café mi alma será
igual de negra a la de ellas si descubren que se más de lo que ellas pueden
ver.
Secretos.....
Secretos y ummm se me olvidaba recordar SHHHHHHH... nos pueden escuchar.
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