viernes, 5 de junio de 2015

A DOS PASOS



A dos pasos.

A dos pasos de tu corazón estaba yo,
sentía que el reloj estaba a mi favor,
sentía que al pronunciar tu nombre se hacía más largo el tiempo,
sentía en mis labios el dulce sabor de satisfacción y seguridad que de por fin a dos pasos de tu corazón estaba el amor.

Oscura la tarde en la que te conocí,
brillante la paz que me brindaste,
grises los tonos de mi alma,
blanco el espacio entre los dos,
rojo el amor que corrió por mis venas,
azul me sentí cuando confiaste en mí,
rosadas mis mejillas al escuchar tu nombre,
pálidas mis manos al no saber que responderte,
café en mis ojos al pensar en ti,
verde la esperanza de volver a hablar contigo,
naranja me volví de esperar bajo el sol,
amarillo el sol que me sonrío.

Azul profundo, azul eterno.

Tu lengua debería ser azul,
tus labios deberían ser como el ancho e interminable mar,
tu sonrisa eterna como la arena,
tu mirada como el atardecer debería enamorar,
tu cuerpo como la luna me debería hechizar.

Tu amor para mí,
es el arte de aprender a vivir,
porque cuando cierras tus ojos y abres tu corazón a dos pasos puedo estar de tu amor.